¡Carisma agustiniano!

Iluminar es la misión que tenemos los cristianos de poder transformar la vida de todos aquellos que nos rodean, aunque muchas veces en los contextos sociales  de nuestra actualidad, nos encontramos ante muchos cuestionamientos que interrogan si verdaderamente los jóvenes están preparados para compartir. Las juventudes agustino-recoletas creemos que desde el compartir autentico de nuestro corazón podemos generar muchas chispas de esperanza y entusiasmo, para todas aquellas personas que nos rodean. Las chispas provienen del fuego motivador del Espíritu Santo, mismo que habita en cada uno de nuestros corazones.

En Ciudad de los Niños hemos querido compartir la experiencia de un IluminAR, fue una experiencia para remontarnos a la acción que vivió la primitiva comunidad cristiana actualizando la vivencia de Pentecostés en cada uno de nuestros colaboradores, voluntarios y jóvenes de muestra institución.

Se llevo a cabo  en dos momentos, ya que en la semana previa a la fiesta de Pentecostés nuestro jóvenes fueron a visitar a sus familias, pero lo pudimos realizar con nuestros acompañantes JAR y algunos formadores humanos junto con sus familias. Tiempo de compartir la Palabra, un momento de interiorizar con la oración, compartir lo que hasta hoy el Señor ha ido inquietando en cada uno de nuestros corazones. Darnos cuenta del paso de Dios en nuestras vidas. Un ambiente fraterno es  una buena definición primordial de nuestro  IluminAR.

La siguiente semana fue replicar lo anteriormente vivido desde una experiencia agustiniana y comunitaria, pero con una intensa inquietud desde el  Espíritu Santo, para con nuestros jóvenes. Fue la velada que nos permitió reflexionar con aquellos que se iban a confirmar, mediante una reflexión sobre los dones que recibimos por medio del Espíritu que Jesús nos prometió antes de Ascender a los cielos.

Iluminar es hoy una ardua tarea que tenemos todos como iglesia, compartir aquello que hemos recibido e inquietar muchos corazones. Hoy el mundo necesita jóvenes que se atrevan a seguir soñando por un futuro apasionado por el Amor que transforma vidas.  Que nuestras vidas sean una acción permanente de iluminar el camino de aquellos con quienes compartamos vida.